Buenas últimamente veo que muchas personas que están en un proceso de pérdida de peso o control del mismo recurren a edulcorantes artificiales.
Los efectos dañinos del azúcar no son un secreto.
Hasta los medios nos recuerdan lo malo que es para nuestro cuerpo.
El azúcar está repleto de calorías vacías y no contiene ningún valor nutricional.
Causa malestar digestivo y debilita nuestro sistema inmunológico.
Pero lo peor de todo, es que el azúcar causa una elevación de insulina que hace que nuestro cuerpo entre en modo de almacenamiento de grasa…
No obstante recurrir a estos edulcorantes artificiales no es la solución, pero ¿porqué?
Por ejemplo, un estudio ha demostrado que la Sucralosa, aspartamo… (el edulcorante utilizado en sacarinas) puede causar lesiones en el hígado y los riñones. Puede causar problemas intestinales al alterar los niveles de pH en el cuerpo. Hinchazón abdominal y chicas no sólo eso que es muy a considerar también retención de líquidos y con lo cual celulitis. Así como ha sido vinculada con el desencadenamiento de las migrañas.
¿Pero sabías qué también te hacen engordar?
Los edulcorantes artificiales engañan al cuerpo con su dulce sabor. Cuando los consumimos, nuestro cerebro recibe señales indicándole que el azúcar viene en camino. Entonces, nuestro cerebro envía esta señal al resto del cuerpo, para prepararlo para la subida de azúcar que se avecina.
Pero como estos edulcorantes no son realmente azúcar, nunca llegamos a sentir esa subida. Así que nos quedamos con las ganas de recibir el azúcar que esperamos. Estos antojos pueden llegar a ser insoportables y nos pueden llevar a caer en la tentación de comer algo dulce.
¿Entonces cual es la solución?
Una manera es utilizando edulcorantes naturales como la Stevia, sirope o azúcar de coco, azúcar d abedul, sirope de agave… Estos edulcorantes, bajos en calorías, no causan una elevación masiva de insulina, como cuando consumes azúcar regular y no sólo eso enriquecerás tú salud con sus propiedades.
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